La pandemia del COVID-19 obligó a las personas y organizaciones a adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones que se impusieron dadas las restricciones de distanciamiento social a causa del virus. En varios contextos: académico, laboral, social y cultural, las videollamadas fueron la mejor alternativa para continuar con las actividades, pero sin salir de casa.

A causa de la crisis sanitaria se implementaron cambios para lograr trabajar, estudiar y relacionarse a la distancia. La conexión a internet tanto fijo como móvil ayudó a asumir el gran reto que significó para todos la nueva realidad. Para los nativos digitales y quienes anteriormente usaban con frecuencia las herramientas digitales fue mucho más fácil este proceso, sin embargo, muchas otras personas no estaban acostumbradas a esta modalidad y significó un gran desafío adaptarse a un entorno virtual. También muchas organizaciones tuvieron que realizar jornadas de capacitación para sus colaboradores en forma remota.

Según un informe de la empresa de telefonía Movistar, se revela que en Perú la demanda de tráfico de internet en la red fija se elevó en promedio un 50%, y en la móvil un 20%. En el marco de la pandemia del covid-19, el tráfico cursado de datos en videollamadas y llamadas sobre aplicaciones móviles creció en más de 5 veces desde el inicio del aislamiento social. El uso de herramientas de teletrabajo y videollamadas crecieron en promedio tres veces a comparación de su uso en una temporada normal. En el caso de los minutos diarios que se dedicaron a hacer videollamadas por dispositivos móviles, el tiempo promedio diario se incrementó un 50%.

Dado el confinamiento repentino que provocó una serie de cambios y variaciones en las relaciones interpersonales y en las formas de interacción, las videoconferencias se consolidaron como un recurso ideal y al alcance que cumplía con el propósito principal de comunicación, aunque fuese en un entorno virtual. Por ejemplo, el Instituto Nacional de Salud Infantil, implementa las llamadas de alegría, videollamadas realizadas por el personal de enfermería del hospital que permitieron el contacto remoto entre padres e hijos contagiados por coronavirus.
 
Por otra parte, la delegación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para Perú, junto con el Instituto Nacional Penitenciario del Perú (INPE) facilitaron la entrega de computadores para que se realizaran videollamadas entre personas privadas de libertad y sus familiares, esta modalidad de reuniones virtuales le dio la oportunidad a los internos vivir experiencias tan significativas como el hecho de volver a ver sus hogares en tiempo real a través de una pantalla.

Fue necesario repensar la vida a través de la tecnología usando los recursos y posibilidades que ofrecen las herramientas digitales, el trabajo remoto, la telemedicina y la educación virtual se siguieron implementando, Hoy es posible contar con un software especializado en videollamadas corporativas, Ringow realiza un chat corporativo que permite conectar el servicio al cliente, haciendo de la comunicación la base para el éxito de una organización. La herramienta permite ponerte en contacto con cualquier persona del planeta en unos segundos. Los colaboradores pueden compartir propuestas, ideas y proyectos con clientes sin importar en donde se encuentren. 
 

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Andina agencia peruana de noticias
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